Esta reforma, aprobada por el Consejo Directivo a través de la Ordenanza 006/2024, responde a un análisis exhaustivo de cada área, asegurando que la coordinación y la eficiencia guíen la administración de nuestros recursos.
La nueva estructura alcanza todos los niveles, desde el Gobierno hasta Departamentos, optimizando la capacidad de respuesta a las necesidades de nuestra comunidad universitaria y de la sociedad. Este proceso también tiene un objetivo claro: revalorizar el rol de quienes brindan apoyo académico, promoviendo su desarrollo profesional a través de una carrera escalafonaria efectiva que les permita progresar a lo largo del tiempo.
Gracias al trabajo participativo, cada función y responsabilidad fue revisada para mejorar la eficiencia en todas nuestras áreas. La actualización de esta estructura marca un avance firme hacia una Facultad más ágil, inclusiva y orientada al futuro.